Holy Molly :O

Dos por tres me autodiagnostico. Cuando anda todo para el orto, me mando un diagnóstico de Lupus al mejor estilo House, ahora, cuando veo síntomas claros, que puedo definir, arriesgo más e intento el gran diagnóstico. Hoy, amigos (?  lectores, el diagnóstico es: adicción a la negación. Quienes me conocen se estarán empezando a reír en este preciso momento -.- Go ahead, rían, pero no se trata de una compulsiva necesidad de gritar NO NO NO. No, es otra cosa. Resulta que existe este diagnóstico, del cual no tenía conocimiento hasta hace unos días, cuando lo leí en una revista en el consultorio del dentista. Ponele que es poco serio que me "instruya" en el consultorio del dentista, pero bue, se dio así y vale, ok? Y me robé la hoja de la revista ¿y qué?  En fin, la definición del mambo este de la adicción a la negación dice: cuando existe un patrón que se repite cuando se conoce a una persona y se evita siempre profundizar en la relación por miedo a sufrir estamos ante (repitamos todos juntos): adicción a la negación.


Síntomas: (leete esto que no tiene desperdicio)


- El adicto a la evitación se evade de la relación de pareja, busca fuera de la pareja todo tipo de actividades y excusas. 


- Usa distintas técnicas de distanciamiento.


- Tiene miedo a ser abandonado. De esta forma piensa, si no me implico, no me dañarán.


- Para mantener el control en las relaciones puede  querer tener la hegemonía del dinero , querer tener siempre razón, incluso llegar a usar la fuerza física (esto me recuerda cuando le tiré un trofeo por la cabeza a mi ex... Mi ex ya no vive conmigo pero el agujero quedó en la puerta del placard porque el muy hdp esquivó el castañazo ¬¬)


- Al adicto a la evitación, puede tener algún tipo de adicción adicional, alcohol, drogas, juego, adicción a los romances. De esta forma busca intensidad fuera de la relación de pareja. (una joya!)


- El adicto a la evitación establece relaciones de pareja poco igualitarias donde se dan altas dosis de sufrimiento, reconciliaciones, más sufrimiento. Son relaciones donde la intensidad emocional es como una montaña rusa. Adictos al amor y adictos a la evitación juntos. La montaña rusa emocional. (cof cof... no comments)


- Llegan a creer que el amor tiene que tener una alta intensidad emocional (dolor, rupturas, peleas, reconciliaciones). En una relación de pareja normal, sana donde no se den estas altas dosis de cambios emocionales, donde no se den las manipulaciones, los juegos de poder el adicto a la evitación no estará bien, le parecerán relaciones aburridas. Necesita sentir la adrenalina en la relación. (¬¬)


- El adicto o adicta a la evitación le gusta el rol de “rescatador” (si lo sabré, lpm)


- Si un adicto o adicta a la evitación nota que la otra persona está muy enamorada, perderá interés, y seguramente escape, aún sin decir nada. Dejando a la pareja totalmente perpleja.


- El adicto a la evitación habla poco, comparte menos, levanta muros para no ser conocido. (esteeem)

Ya pueden dejar de reír, los estoy viendo ¬¬  Ya se hizo largo este post y la armadura me está molestando para escribir. Chau, me fui a levantar paredes.

Just shoot me.

Tengo el "sí" fácil

Cualquier cosa antes que bajarme de un desafío... voy hasta la humillación xD  Pensé en paisajes, figuras humanas, figuras geométricas, abstracto... y salió lo que dije que iba a salir: florcitas, corazoncitos y un patético barquito que le dio el toque patetiquísimo al ya por demás triste dibujo. Fue buena idea la sugerencia de postearlo acá; no resistiría exponerme ante más ojos críticos. Dicho esto, y  habiéndote mostrado mis dotes artísticas, voy a tener que matarte.

Te eximo de cumplir tu parte del trato, sería un abuso =)

Cosas que pasan

... y me sorprendí a mí misma agradeciéndote el haberme dicho la verdad. ¿Hasta qué punto es lógico agradecer la verdad? ¿Qué agradecía y a quién? Gracias a las circunstancias que hicieron que, por algún motivo, me hayas dicho aquello que a otros no le decís, pero a vos, ¿a vos tengo que agradecerte algo? La verdad no se agradece, la verdad se merece, es derecho y obligación...

Me da alas. Es un Redbull

Química, piel, llamale como quieras, lo cierto es que existe y no se puede evitar. Resulta, pasa y acontece (como diría mi mosho Mau) que hay un tipo que me desata la tabla periódica de los elementos completita. Qué genial, no? Sep, el tema es que este señor es el papá de una compañera del jardín de mi hija :$ Todo mal... o todo bien, qué sé yo. Es divorciado, tiene una personalidad de esas que wooooow, es re lindo, alto, tiene una voz que omg, se viste divino, en fin, está para un +10 en google. Varias veces cuando dejo a la enana en el jardín se ofrece a acercarme con el auto  -.- Soy tan pelotuda que hago de todo para zafar, me escondo en el supermercado, me excuso en que tengo ganas de caminar y fumar un cigarrillo, que voy para otro lado, mil pelotudeces que me reafirman que soy una boluda importantísima. Cuando no voy yo al cole, el loco trae a mi madre, la cual muy señorona, se sube al auto y viene sin ningún tipo de drama (obvio, ella no lo ve como lo veo yo) Vive cerca de casa, a 2 cuadras y nos conocemos desde la adolescencia. Se había ido cuando se casó y hace un tiempo volvió. Se ha ofrecido a llevarnos y traernos cuando llueve, cual camioneta escolar ♥. Lo que he huido el año pasado no tiene nombre. Y me da bronnnnnnnnca, porque no tengo motivos lógicos para huir. Resumiendo, el martes pasado la bruji chica tenía un cumple unas 10 cuadras de casa y sin un bondi que nos dejara más o menos cerca. La llevé en un taxi y a la noche, tipo 10:30, hora estimada de finalización de la fiesta, la fui a buscar. La noche estaba espectacular así que fui caminando. Llegué 5 minutos antes de que empezara el "delivery" de invitados a sus padres. Me siento en un muro a fumar y veo que estaciona delante de mí, ÉL. Y lpmqlp, no podía huir -.- Los 5 minutos más largos de la historia, que a la vez fueron los más cortos, porque omg qué lindo es ñ.ñ. Hablamos trivialidades, la típica "cómo pasaron las fiestas" y demás, mientras yo no sacaba la vista de la puerta de la maldita casa donde se hacía la fiesta, esperando que se abriera de una maldita vez. Acá vuelvo a la química esa que hablaba al principio. Es inevitable la odiosa, te hace sentir diferente y se nota. A la hora indicada se abre la puerta del salón y salgo disparada (qué pelotuda, por dios) a buscar a la gorda y ahora sí, huir. Mierda, cuando estoy por zafar me dice "esperá que las llevo". Fue más una orden que una invitación, o yo, en el fondo, no tenía ganas de decir que no. Salieron las nenas con sendos globos onda tirabuzón que medían un metro o más, bolsitas, sobreros y  brochettes de malvaviscos que casi me cuestan un ojo. Las subió atrás, les puso el cinturón, agarró el globo de su nena y me dijo "¿me lo llevás? " Yo con cara de babosa, como si me hubiese dicho la súper frase de amor. Subí, y cuando fui a ponerme el cinturón, él lo terminó de abrochar... ahí empecé a hiperventirlar como Melman en Madagascar. Y así venía yo, sentada a su lado, rozando su brazo cada vez que metía un cambio, con un globo rojo y uno verde entre las piernas, un palo puntiagudo amenazando mis ojos, y la tabla periódica de los elementos a mil. Nos dejó en la puerta de casa, le entregué su  globito, y tratando de no perder la compostura abrí la puerta del edificio, me metí y casi colapso una vez fuera de su vista. Qué lindo essss y qué lindo se siente.

Y colorín colorado, la historia de la boluda a pilas ha terminado.